Nacido casi por casualidad en un jardín de Acapulco, el pádel se ha convertido en cincuenta años en un fenómeno mundial que seduce tanto como inquieta al tenis. Su fulgurante ascenso ya está trastocando el panorama de los deportes de raqueta.
Mientras las federaciones luchan por reinventarse, las academias privadas captan a los talentos… pero también a las familias capaces de invertir decenas de miles de euros al año. Un sistema cada vez más eficaz, pero también cada vez más desigual.
Programas para todas las edades, un camino hacia el mundo profesional en grandes complejos cada vez más modernizados. Tal es el lema de la Rafa Nadal Academy, que descubre a los campeones del mañana y los forma para el altísimo nivel.