Davenport confía en Pegula: «Le dije que no había ninguna razón por la que no pudiera ganar Wimbledon o el US Open»

Jessica Pegula está teniendo un gran comienzo de temporada en el circuito WTA. La estadounidense ya ha disputado cuatro finales desde enero (ganando dos en Austin y Charleston, y perdiendo otras dos en Adelaida y Miami) y ha recuperado el tercer puesto en el ranking WTA, superando a Coco Gauff.
Este sábado, Pegula, de 31 años, estará presente en los cuartos de final del torneo WTA 500 de Stuttgart, donde se enfrentará a Ekaterina Alexandrova. Aún busca su primer título de Grand Slam.
De hecho, estuvo cerca de lograrlo en el último US Open en septiembre de 2024, donde alcanzó la final tras vencer a Iga Swiatek, entre otras, antes de caer ante la número 1 mundial, Aryna Sabalenka.
Lindsay Davenport, capitana del equipo de Estados Unidos en la BJK Cup, habló recientemente para Tennis Channel sobre las posibilidades de que su jugadora triunfe en un Major en los próximos meses.
«Es interesante porque realmente pensé que el Abierto de Australia sería un gran torneo para ella. Venía del US Open, donde había llegado a la final. Las condiciones en Australia son excelentes para ella, con pistas rápidas y pelotas que viajan bien, pero no jugó su mejor tenis allí.
Sé que ha estado trabajando en su saque últimamente, intentando convertirlo en un arma, buscando conseguir uno o dos puntos gratis en sus juegos de servicio. Golpea la pelota tan limpiamente como cualquiera. Aprender a usar más el globo también ha sido una gran herramienta para ella.
También creo que creer que finalmente puede superar los cuartos de final de un Grand Slam la ha ayudado mucho. La tierra batida bajo techo se adapta bien a su juego.
Roland Garros probablemente será el torneo más difícil para ella, considerando cómo produce sus golpes, pero le dije que no hay ninguna razón por la que no pueda ganar Wimbledon o el US Open.
Me encanta su juego y cómo golpea la pelota. Realmente espero que tenga otra oportunidad de ganar un Grand Slam», explicó Davenport, ex número 1 mundial.