¿Por qué la ATP se niega a cambiar la superficie y la ubicación de las ATP Finals?

Desde 2009, las Finales ATP se disputan exclusivamente sobre pista dura indoor, en Europa. Una elección que hace rechinar los dientes, especialmente los de Rafael Nadal en su momento. Pero, ¿por qué el torneo no puede jugarse en otra superficie y/o en otro continente? Elementos revelados por el periódico L’Équipe.

Creadas en 1970, las Finales ATP han cambiado durante mucho tiempo de nombre, superficie y formato. Pero desde 2009, rumbo a la estabilidad: Londres, y luego Turín desde 2021, acogen un torneo disputado exclusivamente sobre pista dura indoor. Una elección que, lejos de ser trivial, responde a una ecuación precisa entre geografía, economía y rendimiento.

Rafael Nadal, eterno rival de Djokovic y Federer, nunca ha levantado el trofeo de la Copa de Maestros. Y sabe por qué.

«Nos clasificamos para las ATP Finals jugando sobre hierba, pista dura, tierra batida y en indoor. Jugar sistemáticamente el Masters sobre pista dura indoor, por lo tanto, no estoy seguro de que sea 100% justo», comentó en 2015 en una entrevista recogida por nuestros colegas de L'Équipe. A lo que respondió un portavoz de la ATP:

«Tenemos en cuenta la ubicación, las infraestructuras, el clima, los husos horarios y la coherencia con la gira europea en pista cubierta». En resumen, la pista dura indoor es el terreno de compromiso perfecto: se inscribe en la continuidad del calendario, evita los largos viajes al final de la temporada y ofrece una regularidad logística ideal para los patrocinadores y emisoras.

Los ocho mejores jugadores del año ya terminan la temporada sobre pista dura indoor en Europa (Basilea, París-Bercy). Volver a viajar luego a Australia, Asia o a una superficie diferente sería un rompecabezas físico y organizativo.

Además, la pista dura indoor permite acortar la duración de los partidos, eliminar los imprevistos climáticos y reducir los riesgos de lesión relacionados con transiciones bruscas (tierra batida, hierba…).

En conclusión: las Finales ATP se anclan ahora de forma duradera en una ciudad sede. Después de doce años en Londres, Turín ha firmado hasta 2030.