Cámaras omnipresentes, jueces de línea en vías de extinción, errores que persisten pese a todo: la tecnología fascina tanto como divide. El tenis, en una encrucijada, sigue buscando su equilibrio entre progreso y emoción.
Nacido casi por casualidad en un jardín de Acapulco, el pádel se ha convertido en cincuenta años en un fenómeno mundial que seduce tanto como inquieta al tenis. Su fulgurante ascenso ya está trastocando el panorama de los deportes de raqueta.
Mientras las federaciones luchan por reinventarse, las academias privadas captan a los talentos… pero también a las familias capaces de invertir decenas de miles de euros al año. Un sistema cada vez más eficaz, pero también cada vez más desigual.
Interrogado por Eurosport sobre la situación actual del tenis francés, Gilles Simon mencionó especialmente un problema de formación. Comparó el caso francés con el de Italia y Jannik Sinner.
Retirado desde 2022, Gilles Simon luego estuvo en el equipo de Daniil Medvedev durante la temporada 2024. En una entrevista para L'Équipe, el francés habló sobre su experiencia con el jugador ruso.