Krejcikova: "Es imposible de creer. ¿Cómo ha podido ocurrir? No tengo ni idea".
Barbora Krejcikova no podía creer que había ganado Wimbledon cuando pronunció su discurso de victoria. Hay que decir que no había llegado a Londres en las mejores circunstancias. Primero con una lesión en la espalda y luego con un virus persistente que la debilitó durante muchas semanas, sólo había ganado 3 de 10 partidos desde finales de enero.
Barbora Krejcikova: "Ahora mismo no tengo palabras, ninguna. Es simplemente irreal lo que está pasando. Es sin duda el mejor día de mi carrera tenística. Y también... el mejor día de mi vida. Es muy difícil explicar cómo me siento.
Me gustaría felicitar a Jasmine y a su equipo. Ha pasado dos semanas estupendas aquí y ha sido una gran final. Ha luchado mucho en cada bola. Y hoy, al final, he sido yo la que ha tenido suerte, pero ella jugó la final del Abierto de Francia hace unas semanas y es fantástico lo que ha conseguido en tan poco tiempo. [...]
No creo que nadie (en mi familia y en la República Checa) se lo crea. Nadie se cree que haya llegado a la final y ganado Wimbledon. Yo mismo sigo sin creérmelo. Es imposible de creer.
Hace quince días estaba aquí, acababa de pasar una primera ronda muy dura, de más de 3 horas, que gané por 7-5 en el tercer set (7-6, 6-7, 7-5 contra Kudermetova). No estaba en buena forma. Antes de eso, había estado lesionada (espalda) y enferma (virus persistente).
Es increíble, ahora estoy aquí de pie y... soy la ganadora de Wimbledon. ¿Cómo ha ocurrido? No tengo ni idea".