Las redes sociales han abierto una era inédita para el tenis: aquella en la que la notoriedad se construye tanto en la pista como en Instagram. Pero, ¿hasta dónde puede llegar esta búsqueda de visibilidad sin hacer tambalear el equilibrio de los jugadores?
El tenis no se detiene nunca… o casi. Detrás de los torneos encadenados, los campeones deben aprender a parar para perdurar. De Federer a Alcaraz, investigación sobre esas pocas semanas decisivas en las que todo se juega: descanso, relajación, renacimiento.
De las hermanas Williams a Alizé Cornet, de los patrocinadores a los circuitos ATP y WTA, el debate sobre la igualdad salarial en el tenis nunca ha sido tan intenso. Entre progresos innegables y desigualdades persistentes, el deporte rey de la raqueta se enfrenta a sus contradicciones.
Carlos Alcaraz acaba de inscribir su nombre junto a los más grandes monstruos sagrados de la era Open, al entrar en el top 10 de jugadores que han pasado más semanas consecutivas en el top 3 del ranking ATP.
El serbio ha levantado el velo sobre sus inicios tensos con Federer y Nadal. De la distancia a la complicidad, Djokovic cuenta cómo el Big 3 aprendió a comprenderse más allá de las pistas.
Antes de retirarse en 2026, Stan Wawrinka puede apoyarse en una estadística que lo sitúa aparte en la era del Big Three, más allá incluso de sus tres títulos de Grand Slam.