« Federer tenía miedo de lesionarse »: el día en que las estrellas dijeron basta a la moqueta

La moqueta, esa superficie mítica que vio reinar a Connors, o incluso a McEnroe, hoy está relegada al olvido del tenis profesional. Sin embargo, en los años 90, dominaba los torneos indoor, desde Bercy hasta Moscú.
Pero detrás del telón, una voluntad de cambio era defendida por nombres como Roger Federer y Rafael Nadal. Jean-François Caujolle, que asumió la dirección de Bercy en 2007, no se anda con rodeos: «A Federer no le gustaba la moqueta. Tenía miedo de lesionarse. Al igual que Nadal. Incluso hubo una petición contra la moqueta ya en Roland Garros, iniciada por Moya, Nadal y los demás españoles», indica en una entrevista recogida por el diario L'Équipe.
La moqueta se considera demasiado rápida, poco propicia para los peloteos y peligrosa para los apoyos. Sin embargo, hizo las delicias de los atacantes durante décadas. Jimmy Connors ganó un tercio de sus títulos en ella, McEnroe más de la mitad de los suyos. Pero la ATP, en busca de un circuito más homogéneo y seguro, acaba por decidir.
Federer, aunque discreto en apariencia, influye directamente en el cambio. A Caujolle, le confía que aprecia el revestimiento de Viena. Resultado: en 2007, la superficie de Bercy cambia para adoptar la que él prefiere.
No obstante, aunque los gigantes de la moqueta deportiva se adaptan como pueden, nada lo evita. Shanghái 2005 marca el principio del fin. En pocos años, los torneos sobre moqueta desaparecen del circuito ATP.