« Espero que ocurra lo más tarde posible», Kostyuk habla sobre el fin de las banderas neutrales en el tenis

Ucrania y Rusia están en guerra desde febrero de 2022, lo que ha tenido consecuencias en el ámbito deportivo. Desde esa fecha, los atletas rusos y bielorrusos están autorizados a participar en las competiciones, pero bajo bandera neutral.

La jugadora ucraniana presente en el top 30, Marta Kostyuk, es consciente de que los jugadores afectados no harán toda su carrera bajo bandera neutral y recuperarán sus banderas cuando llegue el momento. Explica su punto de vista en una entrevista concedida a los medios locales.

«El objetivo inicial de la ATP y la WTA era evitar que la guerra ocupara un lugar en los propios circuitos. A petición nuestra, izaron la bandera neutral el quinto día de la guerra.

Luego, Lesia Tsurenko y yo hicimos un gran esfuerzo, porque Elina (Svitolina) estaba entonces de baja por maternidad y estábamos solas en ese momento. Hice muchos esfuerzos para excluir a los rusos y bielorrusos de los torneos.

Desgraciadamente, no lo conseguí, porque no podemos saltarnos ni las reglas ni las leyes. Consideraron que los jugadores individuales no son responsables de las acciones de su país. Al menos conseguimos de ellos una toma de posición pública, porque cuando representas a un país agresor, debes tener una postura.

Si los apoyas, de acuerdo, es tu derecho, pero dilo para que la gente lo sepa. Eso no ha ocurrido. Muchos jugadores cambian de nacionalidad, lo que para mí es una señal positiva.

Cuando alguien cambia de nacionalidad, mucha gente se pregunta: "¿Ha dicho algo sobre la guerra?" Y yo pienso: "Vale, no ha dicho nada, pero ya ha dado ese paso increíble. Ya no representa a ese país, y probablemente nunca más lo hará, y para nosotros eso ya es una victoria."

Hay progresos. Aunque los jugadores jueguen con una bandera neutral, crea cierta incomodidad porque la gente sabe de todos modos de dónde vienen. No podemos hacer nada, excepto seguir destacando su neutralidad, porque es lo que prevalece hoy en día.

Cuando estalló la guerra, no tenía los conocimientos necesarios para hacer lo que hago hoy. Era una chica de 19 años que intentaba hacer todo lo que podía. Me costó mucha energía, pero me mantuve firme, porque lo que estaba pasando era para mí inaceptable.

Voy a intentar hacer todo lo que esté en mi mano, voy a recurrir a las instancias que pueden influir en la decisión de no devolverles sus banderas, pero nunca podremos tener la garantía de que no ocurrirá. Tarde o temprano, todos sabemos que ocurrirá. Espero que ese momento llegue lo más tarde posible», aseguró así Kostyuk para el medio Tribuna.